La consejera de Cultura y Deporte, Rebeca Esnaola, ha dado a conocer hoy la donación del fondo documental del poeta lodosano Ángel Martínez Baigorri, al Archivo Contemporáneo de Navarra, en la que destacan algunas de las primeras ediciones de sus obras, una colección de fotografías, o la correspondencia que mantuvo con su familia.
En la presentación, que ha contado con la participación de María Jesús Martínez Sanz y Jesús Mª Martínez Paternáin, en nombre de la familia del poeta, y de Maite Sola, del Archivo Contemporáneo de Navarra, la consejera ha señalado que el poeta natural de Lodosa “está considerado como uno de los poetas religiosos españoles más importantes del siglo XX”, y ha agradecido a la familia que “haya pensado en el Gobierno de Navarra como depositario de este fondo; lo que permitirá su mejor conservación y puesta en valor a la ciudadanía”.
Los trámites para la donación del fondo documental del poeta comenzaron en noviembre de 2018, con las primeras reuniones entre el Ayuntamiento de Lodosa, la familia del escritor y representantes de la Dirección General de Cultura del Gobierno de Navarra.
Fue en agosto de 2021 cuando el fondo documental fue entregado al Archivo Contemporáneo de Navarra. Fondo que hasta entonces había sido conservado por los sobrinos del poeta, Jesús Mª Martínez Paternáin y Mª Jesús Martínez Sanz.
A lo largo del último trimestre de 2021 se iniciaron los trabajos archivísticos de organización, descripción, clasificación, así como de digitalización de una selección de documentos y difusión de dicho fondo a través de la web del proyecto de Fondos Contemporáneos y del Presente del Navarra.
Documentos destacados
Entre los documentos ya custodiados en el Archivo Contemporáneo de Navarra destacan la correspondencia mantenida por el poeta con su familia a lo largo de los años, así como una colección de fotografías.
Estas instantáneas fueron captadas en los despachos de las universidades Centroamericana de Managua o en la Iberoamericana de México, donde ejerció su labor, o en compañía de personajes tan conocidos como Humprey Bogart y Shirley Mclaine en Hollywood, o en el Congreso de Escritores celebrado en Toledo en 1950 junto a Luis Rosales, Camilo José Cela o Gonzalo Torrente Ballester.
También son reseñables las primeras ediciones de varias de sus obras, algunas con dedicatorias manuscritas a la familia, como es el caso de “El mejor torero” y “Desde el tiempo del Hombre”; distintas copias mecanografiadas que el poeta regalaba a personas de su entorno más cercano o las obras que le dedicaron otros autores, como el jesuita Juan Bautista Bertrán o Josep Maria López-Picó.
Más numerosa es la documentación que testimonia la labor de recopilación, estudio y difusión de la obra del Padre Ángel tras su muerte, como es el caso de los cuadernos preparatorios para la edición de las “Poesías Completas” de Emilio Del Río, la selección de sus poemas por parte del también jesuita Juan Bautista Bertrán, la tesis doctoral de Concepción Andueza o las ediciones del Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Lodosa, entre otras.
Los recortes de prensa conservados por la familia ponen de manifiesto el prestigio y reconocimiento de la figura y obra del Padre Ángel en la literatura universal.
Biografía de Ángel Martínez Baigorri
Ángel Martínez Baigorri nació en Lodosa el 2 de octubre de 1899. Con 18 años ingresó en la Compañía de Jesús, en donde realizó su formación entre Loyola (Gipuzkoa), Oña (Burgos), Las Palmas y Orduña (Bizkaia). La disolución de la Compañía de Jesús en 1931 tras la proclamación de la II República, le obligó a continuar sus estudios teológicos en Bélgica.
En 1936 fue destinado a Granada (Nicaragua), en la viceprovincia jesuita de Centroamérica. Profesor de literatura entre 1936 y 1946 en el Colegio Centroamericano de Granada, tomó contacto con la vanguardia literaria (José Coronel Utrecho, Pablo Antonio Cuadra, Joaquín Pasos...). A su vez, su obra influiría en grandes poetas nicaragüenses como Ernesto Cardenal, Carlos Martínez Rivas, Ernesto Gutiérrez, Carlos Mejía Sánchez o Fernando Silva.
Entre 1948 y 1954 fue profesor de filosofía en el seminario San José de la Montaña, en El Salvador. De aquí, pasaría a México entre 1954 y 1961, dónde desempeñó el cargo de Decano de Humanidades de la Universidad Iberoamericana.
En esta época contactó con los poetas españoles exiliados Manuel Altolaguirre, León Felipe, Emilio Prados y Luis Cernuda. De regreso a Nicaragua, en 1962, trabajó en la Universidad Centroamericana (UCA) hasta su muerte en 1971. A pesar de su larga estancia en tierras centroamericanas, nunca dejó de sentirse muy unido a su tierra natal.
Su obra poética abarca varias decenas de títulos entre los que se podría señalar: “Romance del mantel de bodas” (1938), “Río hasta el fin” (1951), “Ángel en el país del Águila” (1954), “Cumbre de la Memoria” (1954), “Dios en blancura” (1960), “El mejor torero” (1961), “Sonetos irreparables” (1964), “En la sonrisa del ángulo”, “Nicaragua canta en mí” (1968), “Árbol de Navidad” (1971).